Lo miro largo rato a través del aparador. Tenía unos ojos medio grises, medio azules; él no pudo evitar sentir miedo, pero la presencia de aquella mujer era algo más que perturbadora, parecía estar prohibida.
Realmente estaba acostumbrado a que lo miraran por tiempo extendido, era tan atractivo que era imposible resistirse. La mujer que lo miraba esa vez, llevaba en los brazos un canasto de palma, y adentro un gato.
-¡Misael! ¡Mira que bonito, llevémoslo a casa! – Ese Misael podía resistirse. Lo miraba con una ira inconfundible, e incluso le pareció que bufó con las palabras de la vieja – Iré a pedirlo en el mostrador…
Vio al gatito extender dos garritas, y gesticular un: “ni lo sueñes”, que iba dirigido sólo a él. “¡Oh, Dios! ¿Qué iba a ser ahora?”, se lamentó. Esa mujer estaba decidida a comprar un Alienígena, ¿y luego?, seguro que lo llevaría a casa, y dejaría que esa bestia peluda y parda lo devorara.
Podía ver de reojo a la ancha mujer hablando con la cajera; cuando escuchó que alguien lo llamaba.
-¡Eh, tú! ¡Hombrecillo verde! ¡No tienes nada de adorable, entiendes! –era Misael
-no, de verdad que…
-¡no voy a permitir que Adelaida te lleve a casa! ¡Ni siquiera combinas con el color de la pintura! – lo interrumpió
-¡pero yo…
-pero… ¡cállate! ¡No lo permitiré! ¡y si intentas!
-¡que yo no quiero ir!
-¿en serio? – Misael movió asombrado de arriba a abajo los bigotes
-Es lo que trataba de decirte – El Alien contempló la figura de aquel animalillo, a pesar de todo no era tan bestia, parecía adorable, tan adorable como él mismo.
- Entonces haremos una tregua, tenemos que esconderte – “aunque la inteligencia es muy inferior a la alienígena”, se dijo el Alien.
Misael lo jaló fuera del aparador y lo condujo con suficiencia a través de la tienda de novedades; sólo una vez estuvieron a punto de ser vistos por Adelaida, pero no. Adelaida siguió alegremente a la empleada hasta el cristal donde había visto ese adorable Alien; se sobresaltó con ella cuando se entero que ya no estaba. Parecía una película, pues la empleada sacó un radio y reportó: “ Alerta roja. Alerta roja”. Adelaida se sintió desfallecer, y casi le da un infarto cuando notó que el canasto pesaba menos…
-¡Misael! – él la escuchó, pero no le hizo caso, la primera vez que la ignoraba y no se iba a quedar tan tranquilo.
-¡Eh, gatito tonto! ¿Tu en serio piensas que yo podría robarte el amor de Adelaida?
-¿yo? – Misael entornó sus ojillos verdes, el Alien le hablaba con un tono brusco de mera indignación.
-No debería sacarte a pasear. ¡Eres un desastre! ¿Dices que no soy adorable? ¡El amor con que me cosieron me hizo ser adorable! Mira esta costura de acá –se giró mostrando un hilo verde oscuro que contrastaba con la tela verde claro que formaba su rostro – la señora costurera que me cosió formó aquí su nombre, ¿Cómo dice?
-Alma… - titubeó Misael
-¡observa bien, gato tonto! Yo me la paso en ese aparador, esperando que alguien me lleve a casa, una casa extraña, en donde seguro me van a olvidar pasando la euforia del muñeco nuevo, porque eso soy, un peluche adorable … - pareció que de sus ojos grandes y purpura brotó una gota – ahí adentro de la bodega hay tantos Alien adorables… me quitan merito ¿ entiendes? , no soy tan especial, pero si soy atractivo, eso lo pudiste notar hasta tú… ¡gato tonto!
-¡Misael! ¡Misael! – gritaba Adelaida presa de la angustia, en la puerta de la tienda estaban revisando las bolsas de los clientes en busca del costoso muñeco perdido.
-ve con ella… ¡que esperas! Ya estoy escondido.
Misael lo miró un breve momento y se aproximó a gran velocidad, lo tomó de la antena y lo llevó en su hocico hasta los pies de Adelaida.
Y así fue como “su Adelaida”, regresó a casa una tarde de enero con un hermoso alienígena verde y adorable, tan atractivo que los vecinos sintieron envidia, y ella no pudo más que levantar la cabeza y abrazar más el Alien entre sus brazos; Misael la miraba desde su canasta y de cuando en cuando miraba también al hombrecillo verde, con el que ahora compartiría a Adelaida, que iba sonriendo. Esta vez la casa no seria tan extraña.
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¡Hola! El proyecto de enero para Adictos a la Escritura consiste en crear un relato basado en las sensaciones de un personaje peculiar, de la lista yo elegí: un alienigena atractivo :)
¿Que les parece?, de antemano muchas gracias por pasar a leer :)
Más relatos de Adictos a la escritura: http://adictos-escritura.blogspot.com/2012/01/proyecto-de-enero-2012-sensaciones_26.html
